El Templo egipcio de Debod es el mayor de este género existente fuera de Egipto, y constituye un monumento único por sus características arquitectónicas y por el periodo histórico al que pertenece (Siglos II a. C.- I de C.).
Fue donado a España por el Gobierno de la República Árabe de Egipto en 1968 y, una vez reconstruido en Madrid, quedó expuesto y abierto al público en la ‘Montaña del Príncipe Pío’ en 1972, siendo declarado ‘Bien de Interés Cultural’ por la Comunidad de Madrid, en el año 2008.
En este año 2022, se cumple medio siglo desde la reconstrucción del Templo en su nuevo emplazamiento en Madrid, efemérides que se ha considerado oportuna para proceder a la publicación actualizada de los textos jeroglíficos que cubren sus muros y otros restos arqueológicos que le pertenecen.
El libro recoge un amplio estudio del reinado de Amen-Hotep IIl, noveno faraón de la dinastía XVIII (1387- 1348 a. C.), elaborado a la luz de los más recientes descubrimientos de la egiptología.
El llamado Periodo Amárnico y el revolucionario movimiento religioso del dios Aton, del que fue Primer Profeta el faraón Aj-en-Aton, se produjo en el marco histórico del reinado del padre de este último, Amen-Hotep III.
Su lectura permite comprender adecuadamente el momento histórico y sus protagonistas, planteando tesis novedosas que lo convierten en una imprescindible obra de referencia sobre el final de la dinastía XVIII (1543-1292 a. C.).
Fue donado a España por el Gobierno de la República Árabe de Egipto en 1968 y, una vez reconstruido en Madrid, quedó expuesto y abierto al público en la ‘Montaña del Príncipe Pío’ en 1972, siendo declarado ‘Bien de Interés Cultural’ por la Comunidad de Madrid, en el año 2008.
En este año 2022, se cumple medio siglo desde la reconstrucción del Templo en su nuevo emplazamiento en Madrid, efemérides que se ha considerado oportuna para proceder a la publicación actualizada de los textos jeroglíficos que cubren sus muros y otros restos arqueológicos que le pertenecen.
El Instituto de Estudios del Antiguo Egipto, institución científica radicada en Madrid y fundada en el año 1997, fue invitado por la Dirección del Museo, en la persona del Dr. Alaa Hussein El Menshawy, para organizar una exposición temporal de una selección de los objetos descubiertos por su misión arqueológica en las excavaciones llevadas a cabo durante doce campañas (2009-2020) en la tumba nº -28- de Asasif y en la necrópolis albergada dentro de su perímetro.

IEAE, El Cairo, 2021
El Instituto de Estudios del Antiguo Egipto, institución científica radicada en Madrid y fundada en el año 1997, solicitó, y obtuvo, de las autoridades del Ministry of State for Antiquities de Egipto, los preceptivos permisos para desarrollar un proyecto integral de trabajo, en relación con el área de la Tumba AT-28- de Asasif, que implicaba el estudio de este monumento y su completa excavación, así como su restauración y puesta en valor.. . La primera campaña de excavaciones realizada fue la del año 2009 y, desde entonces hasta el presente momento se sigue trabajando allí ininterrumpidamente. La presente publicación es, por tanto, un resumen de los trabajos realizados hasta ahora, desde el año 2009 hasta el 2016, inclusive, en forma de Memoria extractada preliminar. Aún queda por excavar el Patio, en su mitad Este, y las Tumbas inéditas descubiertas por nuestra misión en anteriores campañas. La publicación de la Memoria definitiva del Proyecto deberá esperar a la conclusión de todas las excavaciones y trabajos complementarios incluidos en el desarrollo del mismo.
Esta exposición permitió al visitante realizar un recorrido por el mundo del Antiguo Egipto, sus dioses, sus reyes, la vida cotidiana, las mujeres y las creencias sobre la muerte que tenían los habitantes del País del Nilo. Consistió en un conjunto de 132 piezas donadas por el Museo Egipcio de Florencia y fue dirigido por Francisco J. Martín Valentín y Teresa Bedman, directora y gerente del Instituto de Estudios del Antiguo Egipto. Gran parte de las piezas expuestas fueron llevadas a Italia por la expedición científica enviada a Egipto del 31 de julio de 1828 al 27 de noviembre de 1829, organizada bajo la protección del rey Carlos X de Francia y el gran duque Leopoldo II de Toscana, que puso a Jean François Champollion e Ippolito Rosellini al frente. Los numerosos objetos recolectados durante el viaje, ya sea mediante la ejecución de excavaciones arqueológicas, especialmente en Tebas, o mediante la compra a comerciantes locales, se dividieron en el camino de regreso entre el Museo del Louvre en París y Florencia. Entre los numerosos objetos de gran importancia histórica y artística, cabe destacar el fragmento de relieve de la tumba de Sety I, procedente del Valle de los Reyes. Otras piezas proceden de la colección Gran Ducal de Toscana formada a partir del siglo XVIII. También destacan las piezas adquiridas por Ernesto Schiaparelli, el descubridor de la Tumba de la Reina Nefertary, Gran Esposa Real de Ramsés II.
Hatshepsut fue un gran personaje que se convirtió en el rey del Alto y del Bajo Egipto. Por ser mujer y faraón hizo temblar los cimientos del reino del Nilo, y sus sucesores la condenaron al olvido -sobre todo los grandes faraones Sethy I y Ramsés II-. Atentó contra los esquemas básicos que configuraban la sociedad faraónica, algo que nunca se le perdonó, y su biografía fue enterrada entre las arenas del desierto.
Como cuidadosos detectives, Teresa Bedman y Francisco J. Martín Valentín -que excavan desde hace años en Deir el-Bahari- se han sumergido en los documentos, desvelado el hilo conductor de los acontecimientos y desentrañado las intenciones de los protagonistas de una historia viva que tambaleó las estructuras y los cimientos milenarios de Egipto. Un imperio que conoció uno de los momentos más brillantes de su historia de la mano del gran faraón que fue Hatshepsut.
El arquitecto Sen-en-Mut fue uno de los hombres más poderosos e influyentes de Egipto durante el reinado de Hatshepsut y Thutmosis III (c. 1479-1457 a C.), en la dinastía XVIII. Desempeñó más de noventa cargos administrativos, religiosos y políticos, y fue el responsable de la construcción de espléndidos monumentos que hoy nos maravillan, como el templo de Deir El Bahari, en Luxor occidental. Sin embargo, a pesar de haber tenido en sus manos el control casi absoluto del poder, desapareció de la escena pública de modo súbito, al mismo tiempo que su soberana, la reina Hatshepsut, a la que estuvo especialmente unido. Aquí se desvelan las claves de este personaje, esenciales para conocer uno de los períodos más apasionantes de la historia de Egipto. Los autores, Teresa Bedman y Francisco J. Martín Valentín, egiptólogos, que actualmente dirigen la misión arqueológica española del «Proyecto Sen-en-Mut (TT353)», aportan novedosas conclusiones sobre la misteriosa vida de tan singular personalidad del mundo faraónico, a la luz de los actuales datos arqueológicos e históricos.
Reinas de Egipto es un trabajo en el que se quiere poner de manifiesto que en el Antiguo Egipto las reinas eran algo más que compañeras de eternidad del faraón. Las mujeres de la realeza fueron las verdaderas depositarias del poder en Egipto ya que ellas conferían, a través de la maternidad, la legitimidad que necesitaban los futuros reyes para sentarse en el trono.
Esta obra marca un antes y un después en la interpretación de las investigaciones sobre el Egipto faraónico.
Para comprender adecuadamente la civilización de los faraones es necesario compartir su íntimo pensamiento. El conocimiento de las fuerzas sutiles del cosmos y su control fueron , para los habitantes del valle del Nilo, dos aspectos esenciales que configuraron indeleblemente el carácter y la naturaleza de su civilización. El autor mantiene aquí que los egipcios también inventaron, crearon o descubrieron, los principios de la magia, la cual no fue simplemente una parte de la civilización egipcia, sin omás bien la estructura que dio cuerpo a todas las magníficas creaciones del espíritu humano que, desde el venerable Egipto, todavía nos fascinan en la actualidad. En realidad, la civilización egipcia fue toda ella el resultado de la magia ejercida y controlada por sus grandes protagonistas: el faraón y sus magos.
El objetivo de este libro es, pues, mostrar, a partir de las inscripciones que nos han transmitido los papiros, las estelas, las estatuas, así como los muros de los templos y tumbas, la concepción mágica global que los egipcios tenían de las realidades materiales y espirituales que les rodeaban y sobrecogían: sus ideas sobre el cosmos, los dioses y el hombre.
Nefertary Merit-en-Mut, Por la que brilla el sol, fue la Gran Esposa Real del faraón Ramsés II, que la calificó como Soberana de la gracia y Dulce en amor.
Tanto la quiso el longevo faraón que no dudó en afirmar de ella que todos sus deseos eran justos, que todas sus palabras, nada más ser pronunciadas, alumbraban la alegría en las caras. Sin duda, fue la mujer más querida de cuantas tuvo el poderoso faraón, guerrero en desiguales contiendas.
En este libro, el lector podrá adentrarse en toda una minuciosa reconstrucción histórica y en la descripción del escaso material que de la memoria de la reina ha conservado la Historia.
La traducción de los numerosos jeroglíficos de su tumba, descubierta por Schiaparelli en 1904, hace que la presente obra sea de consulta obligada para quien desee adentrarse en los textos funerarios de Nefertary Merit-en-Mut, que la cantan como Justificada ante Osiris.
Esta gramática del egipcio medio que ha tenido un enorme éxito en el mercado ha supuesto un avance decidido en la divulgación para no expertos de los elementos básicos del egipcio medio escrito. Su mayor valor es la simplicidad y la adecuación de la terminología gramatical propia de las lenguas semíticas a la de la gramática española. Casi siempre, las personas interesadas en aprender los secretos de la lengua egipcia se han encontrado con las dificultades propias de las grandes obras gramaticales de Erman, Lefebvre o Gardiner, por no citar sino las más conocidas. Aparte de ser necesario conocer bien los idiomas extranjeros en que esas obras están escritas, se hacía necesario conocer también la terminología propia del sistema gramatical anglosajón, germano o francés. Estos aumentaba aún más las dificultades para el neófito.
La Gramática de F. J. Martín Valentín, sin embargo, tal como lo confiesa el autor en el prólogo, aúna con la síntesis de los principios generales de otras muy conocidas, como la de A. De Buck, o la de P. De Bourguet, la sencillez en la exposición y la claridad de sus elementos.
La brillante trayectoria del egiptólogo D. Francisco Martín Valentín , es sobradamente conocida de los especialistas de todo el mundo sobre el periodo del final de la dinastía XVIII, durante el Imperio Nuevo egipcio. Desde que, en 1922, Howard Carter descubriera la tumba del rey Tut-anj-Amón , el público ha tenido al alcance de su mano una luminosa y brillante visión del Antiguo Egipto. Sin embargo, las maravillas halladas por Carter en el hipogeo del joven faraón no representaban mas que los restos de una gran naufragio histórico. Apenas sesenta años antes, la civilización egipcia había alcanzado la cumbre de su máximo esplendor. Nunca antes se llegó a semejantes niveles de sensibilidad artística ni de madurez en todas y cada una de sus expresiones culturales. Dicho periodo luminoso se corresponde con el reinado de Amen-Hotep III, el Magnífico: El disco Solar Resplandeciente, padre del célebre re Aj-en-Atón, con el que se implantó el monoteísmo. Este libro constituye una valiosa primicia y una sólida aportación de la egiptología española a la corriente investigadora internacional que tan activamente esta trabajando en este periodo del Egipto faraónico.